miércoles, 23 de agosto de 2006

Temas de la semana: "D'Elía y Buzzi"

Dos hechos destacados cerraron la semana pasada, pero aún así hoy siguen teniendo su repercusión política, más allá de que uno de ellos haya ocupado primeras planas y el otro sólo se haya difundido en el ámbito agropecuario.
Concretamente, todavía se sigue hablando y analizando tanto el accionar del subsecretario de Tierras para el Hábitat Social, Luis D'Elía, y su intento de expropiación de tierras privadas en Corrientes, como lo ocurrido en el Foro Familiar de Agricultura en la Ciudad de Bs. As. (que reunió a más de 1500 productores de todo el país), y que, por primera vez, marcó un línea de conexión entre la SAGPyA y una entidad, en este caso la Federación Agraria Argentina (FAA).

Sobre el caso de D’Elía y su justicia por mano propia se han conocido las opiniones de entidades como Sociedad Rural Argentina (SRA) y Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), que se manifestaron en contra de la irrupción por parte del piquetero-funcionario. Aún así, la diputada Araceli Méndez de Ferreyra (FPV) presentó un proyecto de ley destinado a expropiar las tierras del empresario norteamericano Douglas Tompkins, que luego no tuvo mucho eco ni siquiera en el propio bloque kirchnerista.
Una conclusión a tomar es que, de la forma mediática en la que se realizó la irrupción (el propio D’Elía convocó medios), se generó que fuera una de las noticias en la semana, y es bastante factible que haya tenido repercusión internacional. De haberse dado eso, seguramente quien estaba pensando en invertir en Argentina y ya tenía dudas, a partir de esto, lo meditará muchísimo más antes de decidirse.
La otra consideración es interna: lo que hay que destacar es que no se puede mirar para el otro lado porque en este caso es un campo ajeno, ya que el silencio no debería avalar este tipo de conductas. Todos deben marcar su posición, para que no haya dudas ni doble discursos políticos.

Por otra parte, tampoco hay que dejar de analizar otra actitud que no suma, como la del titular de FAA, Eduardo Buzzi, quien deslizó que el Gobierno debería coordinar sus políticas hacia el campo sólo de la mano de su entidad.
Por un lado, es aceptable que el dirigente quiera sumar poder (siempre y cuando lo haga honestamente, y desde su gestión), como también es legítimo realizar una jornada tan relevante e inédita como la del Foro Familiar, que le puede dar mucho rédito político y aún más representatividad del sector.
Pero más allá de eso, no es serio que pida semejante ruptura con las otras tres representantes de los productores (o al menos con las dos con las que FAA más está enfrentado, o sea CRA y SRA), más aún en una época en la que el campo argentino necesita, para afrontar y solucionar su crisis, una actitud totalmente contraria a la propuesta por Buzzi. Lo que lo ayudará a salir es integración y coordinación, y no la enemistad y competencia política entre sus integrantes.

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