¡Que vivan los 90!

Todos lo que, hace un tiempo, felicitaban al Gobierno por la medida de prohibir la faena de animales pequeños, deben ahora comerse sus palabras. Algunas grandes cabañas, que teniendo espalda para “aguantar” tener un animal en su campo, fueron las que aceptaron aquella medida.
Pero las voces que protestaron, que marcaron los males que se estaban cometiendo y hasta que amenazaron con medidas de fuerza fueron las que ahora tienen la razón, aunque en vano. Finalmente, el secretario de Agricultura (por presión de Guillermo Moreno), dio marcha atrás con la medida y ahora se baja unos 20 kilos el tope para la faena. Pero como siempre, y como se hace todo: por noventa días.
Así, desde Balcarce 50 esperan que haya más oferta durante las fiestas y que la escasez no se transforme en precios altos en las góndolas. Es obvio que para las navidad y fin de año muchos productos aumentan, por lo que parece que hay que hacer lo imposible para contener precios, a cualquier sacrificio, para mantener el buen humor de los consumidores y evitar que la popularidad K caiga una centésima de punto.
Como siempre, pierde el más débil. Aunque si bien esto es una noticia, el tema es que otra vez se toma una medida “¡¡¡por noventa días!!!!” ¿Nadie puede tomar una decisión que transmita certidumbre? ¿Qué pasó con los famosos “Planes Ganaderos”? ¿Y las conferencias y lanzamientos? ¿Y los subsidios que se lanzaron? ¿El plan de ayuda económica de $200 millones para los productores chicos que mantengan menos tiempo sus animales? ¿Y el gran show de llevar a las entidades de consumidores al mercado de hacienda todas las mañanas?
Hoy está de moda Julio Grondona (presidente de la AFA), quien, en el ojo de la tormenta, popularizó su latigillo “todo pasa”. ¿Será que en el campo también “todo pasa”?
Si repasamos un poco, vemos que casi no hay gestión. El presidente dijo que ésta es dinámica y que hay que ir haciendo lo que quiere la gente. Por lo que se infiere que los que dirigen polícamente la cartera de Agricultura piensan que la gente cambia radicalmente cada noventa días…